Me encantan los collares largos, y siempre acabo cayendo en la tentación de
comprar alguno más, pero… luego cuando los guardo unos junto a otros surge el
problema: ¡se crean unos nudos entre ellos imposibles de quitar!
Por eso, un día, aprovechando una caja vieja de vinos que
tenía por casa de restos de navidades, decidí hacer un joyero personalizado. Este es el resultado:
Tiene que ser una caja de vinos bastante alta (bueno depende
de lo largos que sean los collares que queráis guardar) yo aproveché una caja en
la que se guardaban dos botellas magnum, y lo que hice simplemente fue:
- Barnizar la caja. Escogí un barniz un poco oscuro, pero hay mil opciones, así que provad y escoged el que prefiráis.
- Decorar la tapa: compré un papel decorativo, de los que se usan en scrap booking, y lo enganché en la tapa, usando pegamento de barra. Después le aplicáis una capa de barniz muy suave por encima y así le da el efecto un poquito brillante y os aseguráis que queda pegado del todo.
- Por último, compré en el chino los clavitos para colgar los collares:
Y sólo hay que clavarlos en la caja, preferiblemente en la
parte superior para poder aprovechar al máximo el largo de la caja.
¡A mi me encanta el resultado! Es decorativa y además muy práctica.
¿Os gusta?
Genial Patri, muy buena idea
ResponderEliminarIrene
¡Me encanta Patri!, (el papel que has elegido para la tapa es genial). Práctico, fácil de hacer y bonito, ¡qué más se puede pedir!
ResponderEliminarA mi lista de próximos va ;)
Gracias chicas! Si necesitáis ayuda contad conmigo! :)
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