Esta semanita tenemos a Eli de vacaciones en Menorca... ¡que envidia! Así que he decidido ocupar su espacio de los jueves para contaros un secreto a voces... hasta hace poco me comía las uñas! Y si, es
antiestético y no es nada sano… pero ha sido un vicio difícil de controlar.
El problema es que ahora tengo unas uñas muy débiles, que se
rompen con facilidad, así que por si alguna sufre del mismo vicio que yo, os
comparto los cuidados que estoy siguiendo para tener unas uñas bonitas y
fuertes.
Desde que empecé a ir a la Feria Cosmobelleza, descubrí una
marca que tiene productos muy buenos para el cuidado de las uñas Peggy Sage, y
actualmente soy fiel consumidora de ella.
Para recuperar mis uñas mordidas uso:
1. Gel para potenciar el crecimiento y tratar las cutículas
2. Calcio para recuperar las uñas
3. Endurecedor
4. Líquido con mal sabor que aporta brillo. (probé mordex,
pero te dejaba las uñas feas y sucias si no renuevas cada día la aplicación,
así que prefiero utilizar este liquido de peggy sage porqué el resultado es brillante
y no requiere tanta dedicación diaria)
Este tratamiento no es necesario renovarlo cada día, yo
normalmente lo hago dos veces a la semana: 1 vez le aplico calcio y otra vez
endurecedor, para ir combinando.
Y sobretodo, muy recomendable también utilizar un
quitaesmalte sin acetona, para no debilitar más las uñas, yo me compro este que es enorme, y me dura de sobras para todo el año.
Si queréis chafardear más producto de la marca, aquí os dejo
su web: http://peggysagebcn.com/
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